Desde que somos niños la fantasía juega un papel muy
importante en nuestro desarrollo normal de la personalidad, siendo esta
imprescindible y necesaria para poder expresar libremente nuestras posibilidades
creadoras. Y esto se ve fácilmente cuando vemos a un niño imitando a un
superhéroe o haciendo que vuela para imitar a dicho héroe. En realidad la
fantasía no daña a nadie, sino al contrario, nos estimula; yo misma cuando era
pequeña imaginé tantas y tantas veces ser una heroina. La importancia de la
imaginación en nuestras vidas es que no es limitado, a diferencia del
conocimiento. Hay cosas a las que solo podemos acceder a través de la fantasía.
La historia de los descubrimientos científicos es una clara
muestra de la importancia de la imaginación en el ser humano, interviniendo
como uno de los factores más importantes para poder llegar a dichos
descubrimientos. A lo largo de la historia muchos de ellos han necesitado de
ella, claras muestras de ellas pueden ser la invención de la rueda o incluso la
misma bombilla. Ha sido y sigue siendo tan importante que incluso aquellos
números cuyo cuadrado es negativo los llamamos “imaginarios”. Y es que sin la
fantasía no habríamos sido capaces de llegar hasta el actual desarrollo, quizás
si no hubiese sido por la fantasía solo seriamos otro grupo más de animales.
Pero la fantasía no solo ha sido importante en la historia
científica y de los descubrimientos, la fantasía también nos ha permitido crear
historias y leyendas que perduran y perduran en el tiempo por un gran grado de fantasía
procedente de su autor. Y esto ocurre desde hace miles y miles de años, donde
un claro ejemplo serían los mitos creados por los romanos y sus dioses; y ahora
en la actualidad en más claro ejemplo seria la película “AVATAR” de James
Cameron, en la que seguro la fantasía ha tenido una gran parte de la culpa de
su creación; probablemente este sea el factor más importante de su éxito, ya
que nos introduce en un mundo de ensueño, algo que va más allá del
conocimiento.
Y es por eso que la fantasía debe estar ligada a nosotros
desde un principio para poder desarrollarnos de una forma normal, dando rienda
suelta a nuestra imaginación. Con su ayuda seguro que llegaremos a limites
impensables por el ser humano, consiguiendo en algunos casos esas realidades
plasmadas únicamente en el séptimo arte. La fantasía es capaz de todo.